Arquitectura

CASAS INTERNACIONAL 175 - ARQ. LUCIANO KRUK - Editorial Nobuko diseño

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Refugios contemporáneos
“Los fines de nuestras tareas suelen ser sencillos y claros. Basta con reconocerlos y estructurarlos,
para que nos conduzcan por sí solos a soluciones arquitectónicas significativas.”
Mies Van der Rohe, Arquitectura y voluntad de época.
En varias ocasiones escuché hablar de Luciano como “el arquitecto de las casas
de hormigón”. No creo que su intención haya sido la de hacer “casas de hormigón”,
sino más bien, la de hacer casas en el paisaje que tengan la menor cantidad de elementos
y materiales posibles; que se relacionen bien con el entorno; y que además,
sean construibles de manera práctica, económica y que no generen problemas de
mantenimiento a futuro.
El hormigón es simplemente el medio técnico que él eligió para dar respuesta a
esa búsqueda. La arquitectura es la manifestación espacial de las necesidades de una
época. Luciano hace una lectura de cuáles son esas necesidades y propone una síntesis.
En su obra plantea un modo de vivir donde se reducen al mínimo la cantidad de
elementos necesarios en la búsqueda, tanto de la practicidad como de la estética.
Las casas de Luciano se plantean entonces como refugios contemporáneos. “La
vivienda ha de servir, en definitiva, a la vida” dice Mies Van der Rohe.
Para llevar a cabo esa síntesis funcional y visual elige el hormigón armado, que
no solo le permite usar poco material, sino también, un solo material. El hormigón,
gracias a su plasticidad y capacidad de resistencia, es el material que le permite dar
respuesta a los requerimientos estéticos y funcionales que se plantea. Sus casas son
estructuras mínimas a las que, apenas se les aplica un cerramiento transparente, se
encuentran listas para ser habitadas. Sutileza y practicidad.
¿Por qué nos resultan tan atractivas estas casas que buscan pasar desapercibidas
bajo la sombra de los árboles?
Las casas de Luciano son estructuras que están sometidas a grandes esfuerzos y, a
su vez, son la mínima expresión de materia posible para esa configuración espacial.
Al ser estructuras desnudas, eso queda en evidencia y es muy atractivo. La belleza
está asociada a la verdad. Entonces no hay nada más bello que una estructura en su
punto justo.
Sus casas son un recorrido de contrastes, luces y sombras, llenos y vacíos, que nos
muestran y resaltan aspectos del paisaje donde se insertan.
Yo creo que la fascinación que generan estas obras se debe, tanto a la audacia estructural
como a los contrastes que ponen en evidencia la belleza del paisaje, y lo homenajean

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